lunes, 12 de mayo de 2008

Capítulo 15

Capítulo 15



Charles fue incapaz de dormir más de tres horas. Se levantó con unas décimas de fiebre, algo de malestar general y unas profundas ojeras. –Bueno, por lo menos no estoy peor que antes de dormir‑ pensó mientras se frotaba la cara para espabilarse. Tras asearse, desayunó únicamente una taza de café bien cargado con un par de tostadas, no se sentía con ganas de ingerir algo más sólido.

Encendió su ordenador y empezó a leer los correos. La misma rutina de todos los días, excepto un comunicado de alta prioridad. ¡Dios mío! –exclamó alarmado‑ tenemos una epidemia en toda regla, malditos norcoreanos, en qué coño habrán pensado sus dirigentes. Creen que occidente se cruzará de brazos lamiéndose sus heridas. Idiotas…

Buscó su enorme bolsa de deporte, hizo el equipaje e incluyó su pistola, una SIG-Sauer P228, posiblemente la más fiable que se fabricaba en la actualidad, más los cargadores que también guardaba en su caja fuerte. En teoría no podría portarla fuera de su país, pero ni se le pasó por la cabeza prescindir de ella, ‑al diablo con las normas‑ pensó, era su vida la que estaría en juego y no pensaba ir desarmado.

Cuando llegó a la terminal del aeropuerto, Hagen le estaba esperando fuera, fumando un cigarrillo.

‑Tiene muy mala cara Hagen, ¿se encuentra bien?

‑No es nada señor, tengo algo de fiebre nada más, gracias por preguntar.

‑Bien, ¿qué ha conseguido?

‑Me temo que no he podido conseguir un vuelo directo a Oviedo, tenemos una reserva a Madrid y también me he tomado la libertad de solicitar una avioneta, por si lo prefiere.

‑Olvidaba que es piloto, ¿de qué aparato se trata?

‑Es una Cessna 206H, es bastante cómoda y con una autonomía de unos novecientos kilómetros, podremos llegar en unas cuatro horas y evitar las aduanas. Tenemos allí ya a uno de los nuestros esperándonos.

‑Perfecto, así me dará unas nociones de vuelo, que ya tenía ganas, a cambio le enseñaré algo de español –dijo riendo para relajar la tensión‑, pongámonos en marcha.

El vuelo estaba siendo plácido, tenían ligero viento de cola, lo que acortaría la duración en media hora. Charles se había puesto a los mandos durante unos minutos y le había gustado la sensación, después de una hora de clase teórica casi podría pilotarla él sólo. Otra cosa era hacerla despegar o aterrizar, pensó. Notó que Hagen sudaba copiosamente, a pesar de que en la cabina estaban a unos doce grados. No le dijo nada, supuso que de necesitar ayuda la pediría.

Lograron aterrizar sin problemas. Al descender de la avioneta vieron que de un coche que estaba estacionado pegado a la terminal bajaba un hombre, y se acercaba a ellos dando grandes zancadas.

‑¿Señor Duncan? –preguntó ofreciendo su mano.

‑Yo soy –contestó estrechándosela.

‑Me llamo Williams, soy su contacto de la embajada.

‑Mi ayudante, Hagen –dijo señalándolo mientras se saludaban.

‑Supongo que ya estará al corriente de lo que nos trae aquí, ¿nos va a tener en el medio de la pista todo el día? –agregó molesto.

‑Disculpe señor, pensé que sería mejor hablar aquí para no perder tiempo. Verá, la avioneta que buscan aterrizó aquí pero, cuando la policía llegó a la misma no encontró a nadie dentro. Sin embargo diferentes personas han manifestado haber visto a un individuo que coincide con el retrato robot que les mostré. Lo malo es que parece ser que ha embarcado en el primer avión que ha despegado.

‑Joder otra vez llegamos tarde y ¿qué destino tenía ese vuelo? –gruñó Hagen cada vez más sudoroso.

‑Vigo, en Galicia.

‑¿Y dónde coño está eso? –inquirió nervioso.

‑Cálmese Hagen, no se altere. Respire hombre, llevamos años detrás de él, por un par de días más no va a pasar nada –le reprendió Duncan‑.

‑Vigo es la ciudad más poblada de Galicia, unos cuatrocientos mil habitantes. Tengo entendido que, probablemente, allí se pueden degustar los mejores mariscos del mundo. Junto con La Coruña son las ciudades más importantes de la región y su motor económico. Si no recuerdo mal la ciudad está al sur, cerca de Portugal. No tuve la oportunidad de conocerla, pero si La Coruña, dónde he estado un fin de semana haciendo turismo hace ya un año. Posee el faro más antiguo del mundo en funcionamiento. Este año es candidato a ser considerado como patrimonio de la humanidad por la Unesco. Creo recordar que se llama la Torre de Hércules. ¿Me equivoco? –finalizó sonriente mirando a Williams.

‑Está en lo cierto, señor.

‑Perfecto, ¿cuánto tardaremos en llegar?

‑¿En coche señor? –preguntó con cara de sorpresa Williams.

‑No hombre, en caballo –se quejó Duncan‑. No ve cómo está Hagen, si apenas se tiene en pie, no está en condiciones de pilotar, así que me tocará conducir. ¿Es suyo ese coche? –interrogó señalando el BMW 330D.

‑Sí señor pero…

‑Pero nada, tiene buen gusto Williams, nos lo llevamos. Si tiene alguna queja tramítela a través de la embajada –le interrumpió bruscamente.

‑No se lo puedo permitir, es mi vehículo particular, es…

No pudo concluir. Duncan lo derribó de una patada, lo inmovilizó en el suelo, le arrebató su arma y lo encañonó. –No tengo tiempo para idioteces, ¿entiende? Bien, ahora deme las llaves. ¿Tiene un mapa de carreteras?

‑Ti…tiene gps –gimoteó.

‑Mucho mejor. Entiéndalo, no es nada personal, cuando informe al embajador lo entenderá. Ahora voy a permitirle incorporarse, como haga una tontería va a tener dolor de cabeza durante una semana –amenazó Duncan.

Williams supo que iba en serio y se mostró totalmente dócil, además de avergonzado. ‑ ¿Qué más puedo hacer por usted? –preguntó nervioso.

Vieron que Hagen ya se tambaleaba, se le cerraban los ojos.
‑Ayúdeme a meterlo en el coche y sáquenos del aeropuerto, luego le dejaré en la primera población que crucemos –le ordenó mientras le lanzaba las llaves.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Coruña y vigo más importante que Santiago de Compostela?. VAmos no nos hagas reir por favor, se objetivo y culturízate

Anónimo dijo...

Compostelano, compostelano...que yo sepa Santiago sigue perteneciendo a La Coruña, ¿no? o me he perdido algo en las últimas horas y os habéis independizado?

Jose dijo...

Normalmete, y como podéis apreciar, no respondo a los comentarios. Toda regla tiene su excepción.
Negar que Vigo y La Coruña, que junto con sus comarcas suman una población de más de un millón de personas, son las ciudades más importantes de la comunidad autónoma y su motor económico, no es una falta de cultura. Es una falta de información. No voy a entrar en si Santiago es, turísticamente, la urbe más importante de la región (Muy discutible y subjetivo). Lo que es totalmente objetivo e indiscutible son los datos socioeconómicos de todas las ciudades (Disponibles en internet para su consulta. Moléstate si quieres, compostelano, y búscalos).

Otra cosa. Esto es un simple relato, que gustará más o menos, pero que puedes criticar a tu antojo como hacen otros y no te replicaré.
Saludos a todos.

Anónimo dijo...

Lo que estamos leyendo es una historia de ficción, no creo que venga a cuento entrar en politiqueos de si unos son más importantes que otros. Centrémonos en el relato, y a ver ese siguiente capítulo!!!!